La principal razón es que la izquierda está intentando un cambio sustancial de régimen en colaboración con los separatistas que quieren trocear España y la complicidad de este PSOE de Sánchez. Esto por sí solo ya es suficiente razón. Pero hay más.
Hay hartura por los excesos de una izquierda que empieza a no representar a la clase media trabajadora que ha sostenido este periodo constitucional de paz y prosperidad. Ahora representa más bien a un entramado de élites estatales, académicas y mediáticas, que nos dicen qué se debe pensar, hacer o rechazar. Pocos se atreven a hacerles frente en público so pena de ser estigmatizado como fascista. Se falsea la realidad para promocionar la victimización de colectivos que luego son controlados políticamente. España es un país seguro y los crímenes contra las mujeres están a la cola de Europa y sin embargo las mujeres tienen miedo, hay leyes discriminatorias contra los hombres y se reprime el alto porcentaje de sobreseimientos y denuncias falsas. Se oculta la violencia machista si es de los emigrantes porque tiene más importancia la lucha contra la supuesta xenofobia (y contra la prisión permanente) que la protección de la mujer. Se evita llamar neocomunista a Podemos y golpista al separatismo, pero en cambio se repite una y otra vez que Vox es de extrema derecha.
El amor natural a la patria es cotejado de fascista y se falsea la Historia de España. Se decreta una ley de memoria que, bajo pena, dicta la mentira de que anarquistas, socialistas bolchevizados y comunistas eran demócratas. Un socialista dice que la caza y la tauromaquia son casposas. Pero la primera favorece el equilibrio ecológico y la segunda permite la continuidad del toro de lidia. ¿Son casposos Lorca, Picasso o Sabina? Abundan los subvencionados y subvencionadas corruptores del lenguaje. Los telediarios callan las muertes de hombres a manos de sus parejas femeninas (Chiclana). Se silencian los éxitos de gobernantes enemigos, como Trump, y se evitan las salvajadas de las dictaduras amigas como Irán. Se tolera escandalosamente la figura del ocupa en los barrios mientras líderes progres viven en lujosas urbanizaciones vigiladas. No paran de meter la mano en nuestra cartera a base de mentiras. Por todo eso y más, la nación despierta y la izquierda decae. The times they are a-changin´.