Hoy traigo a colación unas estadísticas positivas que han pasado desapercibidas. Cádiz capital tiene una renta bruta media (25.388) por encima de la española (24.602), y muy por encima de la andaluza (20.824), según confirman de nuevo los recientes datos publicados por la Agencia Tributaria. Ya sé que suena raro, porque estamos acostumbrados a creernos que Cádiz es especialmente pobre (por tradición, los medios buscan siempre datos que aseveren nuestra “pobreza”), pero las cifras están ahí. En Andalucía, Cádiz ciudad está por encima de capitales como Jaén, Córdoba, Huelva, Málaga y Almería, y sólo superada por muy poco por Granada y Sevilla. Si quieren comprobar lo que digo, y examinar por su cuenta, sin intermediarios interesados, el lugar de privilegio que ocupamos en el ranking de renta de todos los municipios de España de más de 1000 habitantes, entren en internet (“pdf viva cadiz”), y pinchen el enlace: http://www.agenciatributaria.es/AEAT/ Contenidos_Comunes/La_Agencia_Tributaria/E stadisticas/Publicaciones/sites/irpfmunicipios/ 2013/jrubikf6d2fcd70c4d0ec216836abfe9f974b43 09c26da4.html. Como estamos con el optimismo de las vacaciones, nombraré otras noticias objetivamente positivas: el auge de Astilleros, la importante ampliación del muelle, el desarrollo imparable del turismo y el crecimiento de la industria aeroespacial gaditana. Y además, el Cádiz en Segunda. Por el contrario, no voy a extenderme en los problemas que nos acucian, en especial el desempleo. Pero diré algo. El desempleo municipal no se puede conocer por la dificultad de averiguar la población activa de cada ciudad (EPA no da porcentajes municipales). A nivel de ciudad sólo tenemos cifras de desempleados registrados, y ahí los datos apuntan a un paro alto, pero similar o menor al resto de Andalucía. Tampoco comentaré otros problemas como el enésimo aplazamiento de la Ciudad de la Justicia (¡hay que afianzar la capitalidad, señores!), ni la pésima gestión municipal, entre otros. Es más, hoy voy a decir algo bueno de este Ayuntamiento: ha vuelto a rebajar otra subvención. Me gusta. A ver si, al no hacer nada, al menos rebajan la deuda y, paradójicamente, terminan gestionando mejor que nadie la necesaria bajada del gasto público. Como en Grecia. Hasta la vuelta.