En Cádiz pocos dicen la verdad. Ya se sabe desde J. F. Revel, que la principal de todas las fuerzas que mueven el mundo es la mentira. Y Cádiz es un mundo en pequeño. Para empezar, el alcalde oculta que su objetivo es un comunismo que no sabe concretar. Su trola sobre los niños famélicos de Cádiz fue de traca y en estos días evita dar su opinión real sobre el golpismo catalán. Hay elecciones.
¿Cuántas fosas de represaliados han descubierto los de la “memoria” tras gastar miles de euros? Ninguna. Esta es una mentira que se seguirá explotando eternamente –que se prepare José Antonio- mientras no se diga por fin la verdad: 1) la izquierda es la principal responsable de la guerra civil por destruir la legalidad republicana y practicar la violencia en la calle; 2) la represión roja fue más intensa. Sin embargo, tras el abrazo de la Transición, la propaganda progre logró envilecer a los conservadores por no dejarse matar en el 36. Mientras tanto, la derecha, no dice que aunque el franquismo fue una dictadura (política), puso a España entre las 10 primeras potencias y la salvó del comunismo: “menos mal que no ganamos”, decimos los antifranquistas de entonces. .
Tampoco muchos de los “luchadores por los Astilleros” fueron claros, pues buscaban en realidad una paguita, como se vio. Aquí hay arquitectos que silencian la chapuza de la cúpula catedralicia y la pérgola, hay una omnipresente asociación de derechos humanos que en realidad es totalitaria (comunista), hay un feminismo subvencionado que no quiere la igualdad, sino la supremacía legal de la mujer (de izquierdas) y la destrucción del capitalismo occidental, precisamente el sistema menos machista, y hay un ecologismo sandía, verde por fuera y rojo por dentro, que pasó del concepto de “calentamiento global” al de “cambio climático” cuando vio que seguía haciendo frío y lloviendo, hasta el punto que ahora augura la inundación de Cádiz en el 2050 (si no hacemos lo que ellos dicen, claro).
Pero la mentira que más nos desprestigia a nivel nacional es la de que Cádiz se hunde. Aquí la responsabilidad local es amplia, pero sobre todo de algunos periodistas, que para no desdecirse, siguen publicando los considerados datos negativos y esconden que Cádiz es la capital con las rentas más altas de Andalucía. Menos mal que la prensa internacional nos ama.